Infiltraciones ecoguiadas
Intervencionismo guiado por ecografía
¿Cómo se realizan las infiltraciones de columna vertebral?
Es imprescindible adaptarse a las necesidades del paciente, con honestidad y ofrecer al paciente todas las alternativas terapéuticas con eficacia probada, quirúrgicas y no quirúrgicas, por ello Barcelona Spine Institute cuenta con su propia Unidad de Terapias no invasivas, coordinada por la Dr. Paola Cavasin, en la que se realizan técnicas innovadoras como las infiltraciones ecoguiadas, sin necesidad de irradiar al paciente.
La ecografía es una técnica de obtención de imágenes basada en la emisión y recepción de ultrasonidos por parte de una sonda. Se usa principalmente como procedimiento diagnóstico y guía de punción en diferentes ámbitos de la medicina (radiología, cardiología, ginecología…).
La excelente visualización mediante ecografía de las estructuras anatómicas del sistema músculo esquelético ha hecho posible la adopción de nuevas técnicas que antes no eran posibles.
Tradicionalmente, las técnicas intervencionistas se realizan mediante fluoroscopia (RX). Sin embargo, la fluoroscopia produce efectos potencialmente nocivos tanto para el paciente, como para el personal sanitario. Además, hay que tener en cuenta que la fluoroscopia precisa para su utilización de unas instalaciones específicas.
En cambio, los ultrasonidos no son tóxicos y al no necesitar instalaciones especializadas pueden ser utilizados en la misma consulta médica.
Asimismo, a diferencia de la fluoroscopia, la ecografía también nos permite la visualización de vasos sanguíneos, músculos, fascias y determinadas cavidades o espacios que, muy a menudo, son el origen del dolor que queremos tratar. Además, la ecografía amplía las posibilidades diagnósticas mediante la localización de derrames articulares, rotura de fibras musculares y tendinosas, artrosis, quistes y procesos inflamatorios.
Hay que recordar que la fluoroscopia consiste en la visualización de estructuras óseas y solamente utilizando contraste radiológico, se pueden observar tejidos blandos.
La indicación de una técnica intervencionista para el tratamiento del dolor crónico surge cuando, el tratamiento conservador consistente en medidas farmacológicas y de rehabilitación, no han sido eficaces.
La identificación de la estructura que queremos tratar se logra con la utilización de la Ecografía que, en resumen, permite las siguientes ventajas:
Trabajar de forma precisa sin necesidad de irradiación.
Visualizar en tiempo real de la aguja y de la difusión del fármaco en nuestra diana.
Identificar con precisión las articulaciones y la musculatura superficial y profunda a tratar, así como, las estructuras vecinas, viscerales (pleura, riñón) y vasculares, para realizar el bloqueo muscular con la mayor seguridad.
En el ámbito de la patología vertebral, el uso de la ecografía nos permite el tratamiento guiado de:
- Dolor vertebral de origen miofascial
- Dolor vertebral de origen facetario
- Dolor derivado de la articulación sacro-ilíaca
- Dolor derivado de la articulación sacro-coccígea y coccígeas o coccigodínia
Los bloqueos articulares y miofasciales pueden ser:
- Diagnósticos: Se utilizan anestésicos locales como lidocaína o bupivacaína, determina el origen y la zona afecta de dolor.
- Terapéuticos: Se pueden utilizar corticosteroides o toxina botulínica o factores de crecimiento plaquetario ocasionando un alivio de mayor duración.
Antes de realizar la técnica es necesaria una analítica con pruebas de coagulación normales.
El bloqueo no podrá realizarse si existe:
- Infección local o sistémica.
- Alteraciones de la coagulación.
- Alergia a los fármacos utilizados.